Cómo operan los montacargas dentro de un cuarto frío a -24°C

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Cómo operan los montacargas dentro de un cuarto frío a -24°C

Los cuartos fríos son ambientes extremos, pero son absolutamente una parte indispensable de la cadena de suministro moderna. Sin estos almacenes especializados, donde las temperaturas pueden ser tan bajas como decenas de grados bajo cero, sería imposible almacenar y distribuir alimentos congelados. Incluso en almacenes frescos, en los cuales se opera a una temperatura más cálida (pero aún fría) las temperaturas son indispensables para el suministro de mercancías perecederas. Los montacargas son esenciales aquí, así como la mayoría de otros materiales de operaciones de manejo, pero no es sencillo operar en estos entornos. Así que, ¿Cómo lo manejan las compañías que los operan? Cada caso es diferente, pero tres factores principales hacen las cosas más fáciles

1. Confiabilidad y buen servicio

Desafortunadamente, las descomposturas son usuales al trabajar en condiciones difíciles. Lo que importa es tener un montacargas listo y funcionando de nuevo después de que sufre una falla. La mayoría de los operadores en cuarto frío tendrán un acuerdo de servicio comprensivo por esa razón – sin contar con uno -, serían muy difíciles de alcanzar una eficiencia decente así como los niveles de productividad

1. Confiabilidad y buen servicio

2. Densidad de almacenamiento

Los costos operativos de un cuarto frío son mucho más altos que en un ambiente de almacén estándar. Todo el equipo y la electricidad necesarios para mantener la temperatura no son económicos. Esa es la razón por la que la densidad de almacenamiento es importante -un almacén de almacenamiento frío más pequeño, el cual utiliza el espacio de forma eficiente, es más accesible para operar. En el caso de algunos, se utiliza una estantería alta, de doble profundidad mientras que al mismo tiempo se mantiene una buena selectividad (facilidad de acceso a las tarimas)

2. Densidad de almacenamiento

3. Diseño especial de montacargas

Si utilizaras un montacargas estándar dentro de un cuarto frío, éste no duraría mucho tiempo sin presentar una descompostura. Ante tan bajas temperaturas, la vida útil de la baterías se reduce, los componente mecánicos fallan más fácilmente, e incluso el acero puede volverse más frágil. Al trabajar con su proveedor, los operadores de cuartos fríos contrarrestan todo lo anterior con montacargas especialmente adaptados. Algunas cosas como fluidos hidráulicos especializados que resisten el espesamiento a bajo temperaturas pueden ofrecer confiabilidad a un nivel aceptable

Algunas adaptaciones importante pueden ser necesarias. En algunos caso se puede requerir equipos de montacargas de doble capacidad y de doble profundidad con un altura de elevación de 11.2 metros con el fin de trabajar en un sistema de almacenamiento de alta densidad
3. Diseño especial de montacargas
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