Las emisiones de los vehículos que queman combustible contienen monóxido de carbono, un gas que es venenoso y muy difícil de detectar. Es incoloro e inodoro, así que la única forma en que una persona puede detectar que está presente en el área es la reacción física a su presencia. Los síntomas de exposición al monóxido de carbono incluyen mareos, dolores de cabeza, náusea y aturdimiento. Si cualquiera de tus empleados se queja de estos síntomas, tómalo seriamente e investiga la causa. Los trabajadores expuestos al monóxido de carbono cada año, pueden resultar hospitalizados, incapacitados o incluso fallecer
Implementar la ventilación es indispensable para prevenir el envenenamiento en áreas cerradas en donde montacargas impulsados por combustibles son operados. Según recomendaciones de las autoridades, un montacargas de gas lp de 60 caballos de fuerza debería contar con una dilución de 5,000 pies cúbicos por minuto. Esto, asumiendo que un solo montacargas es utilizado por cerca de la mitad del día de trabajo, y las emisiones no corresponden a más del 1 por ciento. En muchos casos, las emisiones de monóxido de carbono pueden ser mucho más altas, hasta alcanzar el 10 por ciento, particularmente si los montacargas no reciben un mantenimiento adecuado
Para tal fin es mejor apostar por incrementar la ventilación, si al menos desarrollas una de las siguientes actividades:
- Operas múltiples equipos a la vez
- Cuentas con montacargas de más de 60 caballos de fuerza
- Utilizas los equipos durante más del 50% del día
- Piensas que tus equipos necesitan mantenimiento